martes, 30 de abril de 2013

#124

El 'Siento luego existo' debería ser cambiado por 'Porro, luego vino.'

Otra noche sin dormir, otra noche con susurros de música, otra noche de pensar por pensar. Y esta noche no es de narrativa, es de crítica. Ahí va...

Te critico a vos, si a vos: Banderita de feria Domingo, sordomudo estandarte del qué dirán, lengua de la moral, moral que no encuentra más razón que su propia moral, ensimismada tautología, estúpida por crearse irrefutable.
Te critico a vos, si a vos que también criticás. Decís que esta mal salir a divertirse, decís que la noche es para soñar pero decís que la única forma de soñar es durmiendo. Decís que esta mal bailar así, actos lascivos los llamás, pero la verdad es que no sabés bailar porque bailar no es nada mas que no sentir temor y vos vivís con miedo.

Te critico a vos que denuncias a los que toman, si a vos que te morís por probar. A vos que escondes tus ganas junto con tu piel y demonizás a aquellos que se atreven a sentir la vida. 
Te critico a vos que no tenes los huevos para aceptar el invierno. A vos que el morbo te motiva, que la desgracia de los que no siguen tu librito de recetas te da placer.
Andá a barrer la vereda que el otoño es así. Decile a tu niña que crea en las princesas y en sus príncipes azules, prohibile los problemas después de comer. Decile a tu niño que sea mas macho de lo que puede ser, pedile la espalda de Atlas y recordale que no tiene el lujo de ser mediocre, de ser humano.

Y si la vida no tiene sentido decime: ¿Cuál es el problema si no hay respuesta?
Y si lo tiene porque habrías de saberlo vos. Sobretodo si nadie esta exento de la mentira.
No seas pelotudo, no impongas tan sólo por creer saber. No hay buena intensión en eso. No hay caridad ni solidaridad.
Seguí sin señalar, te lo señalo. Y si no te gusta mandame a la mierda, no hay nada mas fuerte ni autentico como la palabra mierda.

Con tantas reglas la vida pierde tiempo y solo queda arrepentimiento al final. No jodás y disfrutá. 

lunes, 1 de abril de 2013

#123

Hermano, ¿Cómo está ese cuerpo?


Un poco mejor pero todavía no puedo cantar. Mi alma sigue en standby. 

Fue alguna noche, demonios menguaban cansados de su fugaz completitud y amanecía sobre las espaldas de los que podían ver una melodía que era percepción austera, profundo brote de conocimiento irrepetible.

No había ruido, los enemigos estaban desnudos. Tetas amenazantes ofrecían drogas que dejaban huellas.

Lo sabía, moriríamos por un sorbo. Sospecho que todos lo sabían, nadie hubiera podido resistir tal tensión: Ignoraban el desenlace, le escupían al futuro y amamantaban ese niño arrepentido, fatua idea que alimenta la nostalgia, comezón que nos da el presente por no saber entender tanta realidad, tanta nada.

Era una exposición de cuadros viejos que habían desaparecido bajo el fuego de alguna que otra revuelta. Las guerras civiles de la historia dejan marcos renegridos y vacíos, nos dejan con esa estúpida pregunta: ¿Quién habrá estado pintado acá? 

La inconformidad del ser humano puede ser fácilmente explicada con una PlayStation o con algún papel, morimos sin saber porqué y queremos sin saber a quién. Aburridos del espejo, aburridos de jugar, es el hombre ese niño que no puede cambiar.

Las crónicas ya no dan abasto, no hay memoria colectiva capaz de abarcar todo detalle. El bulevar dispone verdes plazas de escepticismo entre una realidad y la otra. Las tetas eran enormes, las huellas también.

Igual creo que mañana ya voy a poder cantar.

#122

Reconstruyo, reformulo, me reemplazo, me libero y humedezco ese algodón en mi alma.
Te beso y siento el gusto de ese frío tierno, del primer momento. 
Te beso y es el Sol la lluvia, la ciudad silencio y tu aroma todo lo que necesita el viento.
Te beso y siento el quiebre que regala el tiempo al extender el beso.
Te beso y es en carne viva que siento que sueño morirme durmiendo. 
Te beso y me despierto.
Me figuro y sueño.