sábado, 12 de marzo de 2016

#223

A la burbuja se vuelve, en ella se escatima toda noción temporal, sobre lo viejo que estas y lo mucho que pasó sin que pasara absolutamente nada.

No hay una idea concreta, no existe patrón alguno que sujete los temblores nocturnos que suponen mis vértigos fantasmas. Sólo queda masticar papel y hablarle a su vientre sobre la sed del hombre.

Sólo queda soñar con tener el suficiente dinero.